Liderazgo como núcleo de la empresa y el deporte
Este jueves 21 de septiembre ha tenido lugar un encuentro entre representantes de empresas y deportistas, organizado por ANEL en representación de los programas de Liderazgo Participativo. El objetivo era poner en común los aspectos que debe tener un buen líder para cumplir sus objetivos y conseguir sacar el mayor rendimiento de su equipo. El evento se celebró en el Nuevo Casino de Pamplona y se estructuró en tres partes: La presentación, una mesa redonda con cuatro deportistas de élite y un discurso de clausura con la entrega de unas distinciones a los protagonistas.
De la inauguración del evento se encargó María José Vivar, responsable del Área de Personal de ANEL. Con sus palabras de bienvenida dio buena cuenta de los logros de la corporación durante el último año y presentó los nuevos talleres de formación para el trabajo con las personas: Relaciones de confianza y El poder del “nosotros”.
Jorge Aguirre, director del Instituto Navarro del Deporte, comenzó su discurso de inauguración destacando el gran nexo que une a empresas y deportes: el papel fundamental del liderazgo. Defiende que “deporte y empresas tienen mucho que ver, aunque nos parezcan sectores completamente alejados.” Acto seguido presenta a los ponentes de la mesa redonda, acto central del evento. Cuatro deportistas de élite, que practican distintas disciplinas, pero que tienen algo en común: Escogieron una práctica deportiva que con total seguridad generó dudas entre sus personas más cercanas. Amaia Osaba, para quien “el piragüismo dista mucho de ser un deporte individual y se trata de una actividad donde la ayuda del club es un pilar imprescindible para el deportista”, un día decidió subirse a un kayak y hacer maratones; Javier López, decidido a ponerse debajo de la portería y actual técnico en la Selección Absoluta, quien apunta “que ese liderazgo autocrático de antaño ha desaparecido porque no tenía recorrido”; Miriam Rivas, actual capitana del Club Atlético Osasuna Femenino y que seguro se encontró con muchos obstáculos para llegar a esa posición, expone que el elemento fundamental para construir este liderazgo participativo es “construir un ambiente de confianza” o Eduardo Prieto, quien tuvo la valentía de ponerse en una posición poco valorada y muy criticada, como es la de ser árbitro de fútbol destaca el liderazgo como “esa forma de poder mostrarse vulnerable”. No es difícil imaginar que para los cuatro el comienzo debió de ser duro, pero gracias a su perseverancia han conseguido alcanzar sus metas.
Otro de los puntos que les une es el trabajo en equipo, algo que según Jorge Aguirre “es fundamental en la forma de entender la empresa. La única forma de alcanzar nuestros objetivos. Ninguna de nuestras metas se puede conseguir sin nuestra gente, sin nuestro equipo.” Para concluir su breve intervención, Aguirre, cita una célebre reflexión: “Más allá del resultado final, de dónde lleguemos, de si conseguimos el mayor de los éxitos o no, debemos disfrutar del camino que hayamos recorrido, porque, independientemente del resultado, habremos sido felices en el intento.”
La importancia del Liderazgo Participativo
El punto central, en el que los cuatro coincidían, es la importancia de un liderazgo participativo. Pero ¿cómo se puede definir este concepto? Eduardo Prieto hablaba de un liderazgo basado en la confianza, “donde puedes permitirte el lujo de ser vulnerable”. Para Miriam Rivas, en un equipo de fútbol, donde intervienen tantas personas, la confianza es fundamental y cree “que es súper importante que todas estemos bien dentro del equipo” para rendir lo mejor posible. Por su parte, Javier Lopez, defiende que el liderazgo ha ido evolucionando positivamente a lo largo de la historia porque “si el papel del líder en el equipo es influir positivamente, yo no puedo obligar a mis empleados a obedecerme. Son las personas las que eligen a quién obedecen.” El caso de Amaia Osaba es, quizá, el más peculiar, ya que el piragüismo es un deporte que lo asociamos a la práctica individual. Sin embargo, el deportista siempre mantiene una estrecha relación con un club porque sin la ayuda del resto de compañeros no se puede avanzar en este deporte. El valor de “pertenencia a un equipo en el piragüismo es muy importante” afirmó en su intervención.
A la cuestión sobre si el liderazgo en el deporte es extrapolable a la empresa, los cuatro ponentes responden con unanimidad. “El nexo común entre empresa y deporte es el liderazgo”. Prieto defiende que una de las mejores escuelas de vida que ha tenido es el deporte, sector donde vas a verte ante derrotas de las que tendrás que rehacerte. Muchas veces las derrotas han sido un punto de partida para una próxima victoria. Esta relación es común a cualquier trabajo. Lopez hace referencia a un estudio que se les hizo a varios CEOs de empresas norteamericanas, llamado “Liderando desde la complejidad” en el que se afirmaba que cada vez era más complicado liderar, ya que el mundo es cada vez más global y en el que se planteó la siguiente pregunta: “¿Qué aspectos son importantes para poder liderar dentro de este mundo, cada vez más complejo?” Todos coincidieron en destacar estos dos: adaptación y creatividad. Algo completamente relacionado con el mundo del deporte, pues “son sectores donde manda la incertidumbre.
La capitana de Osasuna expone una visión desde el punto de vista de las categorías femeninas de fútbol. Muchas de las jugadoras compatibilizan una vida laboral con el fútbol y esto hace que experimenten esos valores deportivos. En el mundo laboral “hay veces en las que te puedes esforzar mucho y no conseguir los resultados que esperabas. Algo parecido sucede en el deporte, pero, afirma, “los que estamos acostumbrados a competir desde muy pequeñitos pues al final llevamos eso innato. Esa constancia, ese trabajo y esas ganas de seguir persiguiendo nuestros objetivos.” Osaba compagina en su día a día empresa y deporte, siendo ella la directora de la Escuela de piragüismo de Caparroso. El piragüismo no es un deporte profesional y los deportistas tienen muchas actividades laborales o formativas, lo más importante es “adaptarte a ellos.” Extrapolado a una empresa, destaca que “en la mayor parte de las ocasiones no vas a encontrar a trabajadores que tengan 100% con todos los aspectos que buscas. Como en el deportista, la clave está en saber complementar a cada uno de ellos.
Punto importante de esta tarde es debatir sobre la estructura jerárquica y los distintos modos de aplicarla. Para los cuatro, a nivel formal, todo el mundo debe de tener claro su rol, pero liderar, como apunta árbitro, “no es una cuestión jerárquica, es una decisión.” En el caso de un equipo existen referentes o “capitanas”, pero influye en gran parte la actitud y la capacidad de cada una. Si no se definen bien los roles luego surgen más problemas. Según el contexto el liderazgo tomará distintas formas: más autocrático, más consultivo y participativo, etc. Javier Lopez dice una frase que define muy bien lo qué nos mueve a las personas a actuar: “Todos nacemos para que nos vean y nos reconozcan. Sentirnos queridos y valorados es una búsqueda del ser humano desde su nacimiento.”
Pero ¿Qué es un líder? Siempre nos hacemos la misma pregunta: ¿El líder nace o se hace? La conclusión a la que llegan en la mesa redonda es que, aunque hay casos en los que líderes han nacido con ciertos talentos, la realidad es que un líder se hace. Nacer con una gran habilidad “es una muy buena materia prima de salida”, pero si uno no trabaja ese talento, no va a llegar a nada.
La mesa redonda concluye, con un pequeño resumen sobre la experiencia de cada uno de los ponentes en la aplicación del liderazgo participativo. Amaia transmite confianza e indica que “lo que más valoran es el esfuerzo, el trabajo.” Esto luego les va a servir para toda la vida y para el trabajo en la empresa. El técnico de la RFEF, como psicólogo y entrenador de porteros, no recomienda el aprendizaje pasivo de los chavales. “El jugador es protagonista de su propio aprendizaje.” Debe poder interpretar el juego y tomar sus propias decisiones y asumir los fracasos. Lopez lo resume muy bien en esta expresión: “El éxito no es el triunfo y el fracaso no es la derrota.”
Con esta reflexión, se concluye el evento protagonista del encuentro y da comienzo la intervención de Miriam Martón, directora del Servicio Navarro de Empleo y el discurso de clausura de Ignacio Ugalde, presidente de CEPES y ANEL. A continuación, se agasaja a los distintos ponentes con una entrega de placas en reconocimiento a su recorrido.
Con esto, y una foto final, finaliza el encuentro y da comienzo una pequeña visita por el casino a la vez que se le ofrece a los asistentes un pequeño aperitivo y refrigerio para recobrar energías.
